A la mañana siguiente por supuesto Martina se cambio de habitación y poco después los patrones llegaron a la casa; La señora Laura por supuesto venia con algunos tragos de más, lo que la obligo a recluirse a su alcoba para poder descansar. El señor Tomas se limito a bañarse y pedirme que le preparará el desayuno pues estaba retrasado para el trabajo, el delicioso aroma de la comida atrajo a Alex y además a la desvergonzada de Martina que bajo las escaleras aferrada a él como una sanguijuela.
Comieron en silencio y el señor Tomas se levanto apenas su plato estuvo vacío, le dijo un distante adiós a Alex y beso a Martina en la frente cariñosamente ella le devolvió una sonrisa.
-pasaros bien esta tarde-
La puerta se cerro tras él y Alex pego un brinco levantandose de la silla beso a la chica en los labios y se retiro, ella siguió sentada en la silla comiendo una toronja.
-Aurora serias tan amable de servirme un poco de agua, Por favor.-
-si señorita.-Cada segundo que pase sirviendo el agua en su vaso devia controlar mis nervios y emociones porque no podía creer que ella completara el corazón de Alex y lo hisiera tan feliz.
Después de un par de horas ambos estaban listos para salir a divertirse, Alex se despidió de mi con un cariñoso beso en la mejilla que por supuesto hiso que Martina se enfureciera y yo enrojeciera... Sentí como poco a poco mis mejillas se afiebraban. La tarde paso sin novedad alguna, la señora Laura despertó un par de horas después de la salida de Alex preguntando obviamente donde se encontraba él y el señor Tomas.
Al caer la noche Alex llego y se recosto en el sillón de cuero negro de la sala de estar.
-¡Aurora!- Perecía agotado y desganado.
-si, ¿necesita algo Alex?-
- Alguien con quien hablar...- Su propuesta me resulto extraña pero me senté en el sillón cerca de él, prestando atención a lo que diría.- Ella...Martina me engaño Aurora, se burlo de mi todo este tiempo. Tenía un romance con mi mejor amigo y ninguno de los dos fue capas de decirme la verdad tuve que descubrirlo cuando dejo su teléfono en la mesa del café y él le mando un revelador mensaje de texto... me siento tan traicionado y utilizado.- Sus ojos comenzaron a llenarse de un brillo poco común y las lágrimas comenzaron a recorrer cada centímetro de su perfecto rostro de porcelana.
- Alex... No te pongas así por favor, arriba ese animo ella no te merece.- No tenia más palabras de consuelo, por lo que solo tome su rostro entre mis manos seque sus lágrimas y lo abracé. Él no se sorprendió y me estrecho contra su cuerpo permanecio aferrado a mí hasta el instante en que su madre grito para poder conseguir ayuda de mí, ambos nos sobresaltamos y yo corrí escaleras arriba mientras el se quedo sentado mirando como subía para auxiliar a su madre.
Al bajar él estaba recostado en el sillón mirando al cielo ya más calmado, me dirigio una fugaz mirada de agradecimiento y se levanto.
-Aurora, ¿Te gustaría salir con migo?-
-Señor Alex eso no es posible y usted lo save-
-Deja las formalidades Aurora y vamonos.- Rápido y fugaz tomo mi brazo izquierdo y me llevo a mi habitación.- No quiero que salgas de allí hasta que estes vestida como una chica de 17 años, ¿ok?-
-Ya que más da...-
tomé lo primero que vi en el armario indesisa aun de lo que estaba haciendo, unos jeans, una polerita color morado que destaba mi cintura, sote mi cabello y me puse un poco de brillo labial. Al salir Alex estaba sentado apollado en la muralla tarareando una canción.
- Pero... te vez hermosa Aurora.-
-Gracias Alex.- Sin lugar a dudas en ese instante mis mejillas estaban rojas.
- Te encantará el lugar al que te llevaré.- Parecia emocionado.
-Su madre se molestara si me ve así y no creo que me...-
-Aurora callate ya, mamá esta durmiendo y probablemente no despertara hasta mañana... deja de preocuparte tanto mujer.-
- Esta bien, dejaré la palabreria... Lleveme donde usted quiera niño Alex.-
-Alex solo Alex.-
-Si Alex-
Nos dirijimos al coche en silencio y recorrimos un largo trallecto hasta que llegamos a un lugar apartado donde se encontraba un pub, no me molestaría entrar allí pero el problema es que mis habilidades con el baile son cero y probablemente Alex queria bailar para olvidar todo el tema de Martina... realmente no estaba preparada para eso.
Continuara...
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